En un futuro “lejano” existe una sociedad llena de prejuicios y carente de conocimientos, en donde la Televisión es tu mejor amiga o mejor dicho La familia. Lo cual no se aleja de nuestra realidad donde las compañías televisoras se encargan cada vez más de transmitir una programación chatarra que no deja ninguna oportunidad para la crítica, te conducen al consumismo y se dedica a transmitir la vida de los “famosos” que, mas que talentosos, son un grupo de gente sin cultura ni conocimiento alguno de lo que les rodea.
Es en esta novela donde Ray Bradbury describe una historia de carácter distópico de la raza humana tan aterradora que provoca un sentimiento de aborrecimiento ante el simple hecho de imaginar que eso se vuelva realidad, no obstante no dudo de que en algún país lejano se le prohíba adquirir conocimientos para crearse un criterio y un hábito de critica.
Por que leer libros es un delito y conservarlos también, los bomberos de esta realidad se dedican a incendiar en vez de apagar, pero ¿qué incendian? (así como en nuestra realidad la ley se encarga de “quemar” las plantas como marihuana –ja!-) en esta historia se queman Libros! el motivo, los libros hacen infelices a las personas y así no son iguales ni controlables para el aparato gubernamental. En una parte de esta novela me recuerda una parte en donde se le pregunta a el bombero Montag si es verdad que antes los bomberos apagaban incendios en vez de provocarlos, a lo que éste le responde que eso es absolutamente absurdo!.
Montag, que es el personaje principal, se dedica a detectar a quienes se atrevan a violar esta ley ya sea almacenando o leyendo y a incendiar cualquier libro de las personas denunciadas, conoce a una niña llamada Clarisse que le cuestiona sin miedo, sobre sus sentimientos y forma de pensar y de si se ha atrevido a leer alguno de los libros que quema.
En el transcurso de la historia Montag, se cuestiona y comienza a dudar y a sentir la curiosidad de saber qué es lo que dicen aquellas hojas de papel encuadernadas que tanto prohíbe la ley.
Y como en cada historia de este tipo hay alguien que cambia de parecer al de las masas, esta no es la excepción, leyendo (como niño de primaria) párrafos de los libros que alcanza a rescatar en el cumplimiento de su “deber”.
El solo hecho de pensar en una situación así me parece aborrecible y espero que nunca, como sociedad individual e intelectual que somos, permitamos que algo tan despreciable como esto nos suceda.
El título de la novela es la temperatura a la que los libros arden en este mundo distópico.
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Y como a la gran mayoría de las novelas se les lleva a la pantalla grande esta no es la excepción, dirigida por François Truffaut en 1966.
La película nos acerca más a este mundo y nos muestra gráficamente cuan terrible puede ser quemar cientos de libros!. Incluso hubo cierta polémica por el simple hecho de quemarlos para hacer el filme.
“Los abogados hollywoodenses de la Universal (productora de la cinta) querían que no se quemaran los libros de Faulkner, Sartre, Proust, Genet, Salinger, Audiberti...: "Limítese a los libros que pertenezcan al dominio público", dicen por temor a eventuales procesos. Eso sería absurdo. He consultado a un abogado de Londres que afirma: "Ningún problema. Tiene usted todo el derecho de citar todos los títulos y autores que quiera". Habrá tantas citas en Farenheit 451 como en los once films de Godard juntos... Sólo hoy me he dado cuenta de que es imposible dejar caer los libros fuera de cuadro en esta película. Debo acompañar su caída hasta el suelo. Los libros son aquí personajes, y cortar su trayecto equivale a dejar fuera de cuadro la cabeza de un actor. Notaba que algunos planos de la película eran malos desde el principio y ahora comprendo que era a causa de esto.”
François Truffaut
La historia no es exactamente igual (nunca lo es) pero respeta los detalles importantes, además agrega un poco más a los ambientes cotidianos de la historia, una película que sin duda te aburrirá si no has leído previamente la novela. Uno de los detalles de los que se agregaron y que me pareció interesante es que los ciudadanos en vez de leer un periódico en el transporte público, se muestran leyendo un periódico sin letras pero con imágenes o dibujos que representan situaciones, es bastante curioso ver a esa gente tan concentrada en ello que se vuelve gracioso para uno.
Les dejo el tráiler de la película y ojalá se animen a leer el libro, mi recomendación es primero lean el libro 
, es probable que después de esto no veas a los bomberos de igual forma.
, es probable que después de esto no veas a los bomberos de igual forma.
"Un libro en manos de un vecino es como un arma cargada."
Una canción que me recuerda también a los bomberos, te la dejo
.Saludos y no dejes de comentar!
queenhelen
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